Si se te cae un diente, no te desesperes, si eres un buen niño viene el Ratón Pérez...
Valentina se pasa todo el día tocándose su diente, y es que se le mueve desde hace más de un mes pero hace un par de días que lo tiene ya muy sueltecito... Y de pronto hoy le han entrado
varias preocupaciones:
1. -Mamá, ¿por dónde entra el Ratoncito Pérez?
pequeñito...
2. -¿Y Zarpitas no le hará nada?
Entiendo perfectamente la preocupación de mi hija...
Zarpitas caza un ratón diario y nos lo deja en la alfombra del
porche.
-No Valentina, a Zarpitas no le gustan los ratones que van
vestidos como las personas.
3. -Mamá... ¿y si se me cae el diente en la acampada que haremos? ¿el Ratoncito Pérez nos encontrará?
Ups! es verdad, nos vamos de acampada dos días y no lo
tengo previsto...
-¡Sí! ¡claro que nos encuentra!
4. -Pues deberías hacerme una fundita para que no se pierda el diente por debajo del saco de dormir.
¡Oído cocina! Enseguida me pongo manos a la obra.
Ya me veis buscando materiales en casa y haciendo una manualidad con Valentina.

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